Marzo 1998.Buzios, Brasil
Alla
es donde comenzo todo. Papa y yo, aun recuperandonos animicamente de lo que
significa la perdida de un hijo, e Ivo de tan solo 3 anitos, compartiendo todo,
juntos, solos…
La
musica brasilera, sus comidas, sus olores, todo me recuerda el dia en que te
concebimos. Quiza por eso siempre creiste que eras de alla, y nosotros, sonriendo,
nunca te lo negamos.
Durante
todo el embarazo, no hice otra cosa que comer helado. Tenia calor siempre, con
decirte que pase el invierno en remera. Llegaba al trabajo y prendia el aire
acondicionado, a pesar del invierno.
Las
chicas me querian matar, andaban todas con bufanda y las camperas puestas. Yo
siempre acalorada.
En
cada ecografia, y al medir el largo del femur, me confirmaban que no ibas a ser
bajita (y no se equivocaron).
Pasaron
los meses, y yo cada vez mas pesada. La obstetra tenia miedo de seguir
esperando. Me faltaban todavia 10 dias para la fecha de parto. Me atendio el
dia 9 de diciembre, y cuando vio el tamano de mi panza, se asusto y me dijo:
Manana te hago la cesarea!
Yo
queria seguir esperando, pero ella se nego, y al dia siguiente, 10 de diciembre
y tal como ella me habia sentenciado, a la manana muy temprano, naciste en
la Clinica Suizo Argentina de Buenos Aires, con 4,500 ks y 52 cm de largo!!
De
prominentes cachetes rosados, iluminaste mi vida al nacer.
Tamano
bebe de 2 meses, nada de la ropa que tenia para vos, servia. Nos arreglamos
igual.
Primera
noche juntas, viene el doctor y me dice: “vamos a dejar a Fiamma en observación
porque parece que tiene fiebre: su temperatura es de 37 C”.
Encienden
el aire acondicionado, para ver si asi te bajaban la temperatura.
Pero
nada cambio.
No
tenias fiebre. No estabas enferma.
Carioca
y de sangre caliente (por eso tanto calor y tanto helado!!!)
Nunca
voy a olvidar tu pelo, esos rulos espectaculares, brillosos que te caian
salvajes en tu cara, preciosa con esos ojazos,
tan sensible y cariñosa. Y esa dulce y única vocesita.
Cuanto tenias nueve meses, yo venia de trabajar y cuando te alzaba, no se
porque razón me mordías. Pero lo hacias con tanta fuerza, que me dejabas los
moretones del tamaño de una pelota. Ya se me habían acumulado unos cuantos en
diferentes partes de los brazos. Cuando
fui a la psicóloga, me vio y me dijo tocándome la mano: “a mi me podes decir la
verdad” Ella no creía que eras vos que me mordías!!! Me dijo que lo hacias porque algo no te gustaba ( que me fuera a trabajar?) y que no podía
permitir que me mordieras de esa manera, que tenia que hacerte lo mismo, muy
fuerte, para que aprendieras que eso dolia.
Lo
comente con amigos, compañeros de trabajo, familiares, y todos coincidieron en
que la psicóloga, estaba totalmente loca.
Mientras
seguías mordiéndome y dejándome tus violáceas huellas en brazos y cara, decidi
tomar el consejo de la profesional de la mente.
No
fue fácil. Te mordí, y espere. Me volviste a morder. Te mordí otra vez, mas
fuerte. Me volviste a morder. Entonces te mordí con todas mis fuerzas, y
lloraste…(yo también!)
Pero
nunca mas me volviste a morder. Bendita psicóloga donde sea que este, tenia
razón!!
Nunca
entendiste porque un dia decidimos dejar a nuestras familias, nuestro país,
nuestra cultura, para probar suerte en otras tierras.
No
fue fácil semejante aventura. Ayudo mucho que fueras tan pequeña.
Cuando
tu hermanito comenzó el cole, y lo escuchabas hablar en ingles, decidiste que vos
también podias participar, solo que la única que entendía lo que decias eras
vos. Los chicos te miraban, se miraban y se iban.
Los
anos pasaron, te convertiste en una excelente jugadora de futbol, dejando tu huella
en cada partido. Los clubes nos apilaban las invitaciones para que formaras
parte de ellos.
Dejaste
de lado los zapatitos de plástico y los teléfonos
de juguete por los high heels, celulares
y planchita.
Ahora
ya sos una mujer…
Humilde
y cariñosa. Un poco introvertida tambien. Pero hermosa por dentro y por fuera,
con un corazón sensible y generoso, capaz de sacrificar su propio beneficio por
el de los demás.
Muchas
cosas te tocaran vivir, felices, tristes, pasajeras. Los vientos de la vida te podrán
alejar hacia otros rumbos y hacia otras personas. Te podras rodear de otras
familias con las que compartiras muchas otras vivencias que delinearan tu
camino en esta vida.
Pero
nunca jamas podre olvidar, que en mis momentos mas tristes y derrotada, fuiste mi pequeña “llama de alegría”.
Deseo
que la vida te premie con lo mejor, y que en estos 15 anos que hoy estas
cumpliendo te prometas a vos misma, que sea lo que sea que te toque vivir, lo
hagas con aceptación y valentía.
Gracias
por permitirme, desde hace quince anos ya, ser mejor persona, ser mejor mama…
Te
quiero mucho. Feliz cumpleaños!!!!
Mama!
Desde California
por Marisa Furno